En el vasto código de nuestro amor, desde el SQL que consulta nuestros destinos hasta el Java que construye nuestro mañana, avanzamos como el tiempo en C, paso a paso con la paciencia de un Go, forjando nuestro camino en el lenguaje del corazón. En cada línea de Python, entrelazamos nuestras vidas como bucles infinitos, mientras en Ruby, pulimos cada momento con la elegancia de sus métodos. En Swift, nuestro amor es ágil y dinámico, en TypeScript, nuestros tipos se complementan a la perfección como funciones en Haskell. Desde el CSS que adorna nuestros encuentros hasta el JavaScript que anima nuestras sonrisas, cada sintaxis es un susurro de nuestro romance, donde el HTML de nuestra historia se entrelaza con el diseño de nuestro futuro. Así, en este compilado de lenguajes y amor, escribimos nuestra historia, donde cada commit es una promesa de amor eterno.